Después de un inicio de año bajo en número y valor de transacciones M&A, derivadas de la incertidumbre en los mercados, efecto de Brexit, ralentización de la economía China, entre otros, se prevé una etapa de fuerte recuperación, derivado de las tipos de interés negativos y la generosidad del BCE.

Mientras los fondos PE han estado generando una enorme cantidad de cash para invertir en los últimos meses, la dificultad esencial consiste en la identificación de targets para invertir o adquirir. En estas circunstancias, es un momento ideal para incrementar los niveles de endeudamiento o bien sustituir por una financiación a unos tipos más bajos. Por otra parte las empresas están viendo signos positivos en sus pedidos, ventas y resultados después de años de crisis en eurozona.

Con estos ingredientes, se prevé una oleada inminente de operaciones M&A en la parte final del 2016. La complejidad para los inversores vendrá derivada de los diversos ángulos a plantear en las operaciones, decisiones en relación sectores o geográficas, como elementos que serán más críticos que nunca.